La tarta de mousse de frutillas es un postre fresco, elegante y perfecto para ocasiones especiales. Con una base crujiente de galletas y coco y un relleno suave de fresas frescas, conquista por su sabor y su presentación vistosa.
Ingredientes
Para la base
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2 tazas de galletas Graham trituradas
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¾ taza de coco rallado
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2 cucharadas de azúcar
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½ taza de mantequilla derretida
Para el relleno
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3 tazas (425 g) de frutillas frescas picadas
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½ taza de agua
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1 ¾ tazas (420 ml) de crema batida espesa
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4 onzas (113 g) de queso crema
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1 taza (120 g) de azúcar glas, tamizada
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1 cucharada de extracto de vainilla
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½ cucharadita de sal
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1 paquete o 4 cucharaditas de gelatina en polvo sin sabor
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4 cucharadas de agua fría
Para decorar
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Frutillas frescas
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Pistachos triturados
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Flores comestibles
Instrucciones
Base de galletas
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Precalentar el horno a 180 °C. Engrasar un molde de 28 cm y cubrir la base con papel vegetal.
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Triturar las galletas hasta obtener textura de pan rallado.
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Mezclar con coco, azúcar y mantequilla derretida.
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Presionar en el molde hasta formar una base uniforme.
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Hornear de 10 a 15 minutos, dejar enfriar.
Relleno de mousse
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Licuar las fresas con ½ taza de agua y colar para retirar semillas. Reservar.
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Batir la crema, el queso crema, el azúcar glas, la vainilla y la sal hasta que la mezcla esté esponjosa.
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Disolver la gelatina en 4 cucharadas de agua. Añadir 2 cucharadas de puré de fresa, calentar 12 segundos en microondas y mezclar.
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Incorporar la gelatina al resto del puré y luego añadir suavemente a la mezcla batida.
Montaje
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Verter la mousse sobre la base.
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Refrigerar al menos 4 horas.
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Decorar con fresas frescas, pistachos y flores comestibles.
Consejos Adicionales
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Puedes preparar la base con antelación.
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Añadir unas gotas de jugo de limón intensifica el sabor de las fresas.
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Si no tienes flores comestibles, decora solo con fresas y pistachos.
Versión para Diabéticos
Si quieres disfrutar este postre en versión más ligera:
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Usa galletas integrales sin azúcar para la base.
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Reemplaza el azúcar glas por edulcorante en polvo (como eritritol).
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Utiliza crema light sin azúcar añadida y queso crema reducido en grasa.
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Añade un poco más de vainilla para realzar el sabor.
Así tendrás una tarta igual de fresca y deliciosa, pero con menos carga glucémica.
Una tarta cremosa, fresca y delicada, con la ligereza de la mousse y el toque crujiente del coco. Un postre para enamorar a simple vista y al primer bocado.
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