Sopa de Papas con Queso Cheddar, Ajo y Hierbas: Confort en Cada Cucharada

 



Cuando el clima pide algo cálido, reconfortante y lleno de sabor, no hay nada mejor que una buena sopa casera. Esta receta de sopa de papas con queso cheddar, ajo y hierbas es todo lo que buscas en un plato: cremosa, aromática, reconfortante y con ese toque de queso que la convierte en un verdadero abrazo en forma de comida.

Perfecta para cenas ligeras, almuerzos de fin de semana o como entrada para una comida más elaborada, esta sopa es simple, económica y deliciosa.

¿Te animas a prepararla?

Con ingredientes sencillos y pasos muy fáciles de seguir, esta sopa puede estar lista en menos de 40 minutos y será un éxito garantizado. Ve por tu olla grande y pongámonos a cocinar.

Tiempo de preparación y cocción

  • Preparación: 10 minutos
  • Cocción: 30 minutos
  • Total: 40 minutos

Porciones

Rinde 4 a 6 porciones

Ingredientes

  • 4 papas grandes (aproximadamente 2 libras), peladas y cortadas en cubitos
  • 1 cebolla mediana, picada
  • 3 dientes de ajo, picados
  • 4 tazas de caldo de pollo o verduras
  • 1 taza de crema espesa
  • 1 taza de queso cheddar fuerte, rallado
  • 2 cucharadas de mantequilla
  • 1 cucharadita de tomillo seco
  • Sal y pimienta al gusto

Paso a paso

  1. En una olla grande, derrite 2 cucharadas de mantequilla a fuego medio. Añade la cebolla picada y saltea durante unos 5 minutos hasta que esté transparente.

  2. Incorpora los dientes de ajo picados y saltea durante 1 minuto adicional, hasta que suelten su aroma.

  3. Agrega las papas cortadas en cubos y el caldo. Lleva a ebullición, luego reduce el fuego y cocina a fuego lento durante 15 a 20 minutos, o hasta que las papas estén tiernas.

  4. Para una textura cremosa, tritura parcialmente las papas con un machacador de papas o usa una licuadora de inmersión si prefieres una consistencia más suave.

  5. Añade la crema espesa y el queso cheddar rallado. Revuelve bien hasta que el queso se derrita y la sopa tenga una textura cremosa. Agrega el tomillo seco, sal y pimienta al gusto.

  6. Sirve caliente en tazones y, si lo deseas, decora con más queso o hierbas frescas por encima.

Variaciones

  • Con tocino crujiente: Agrégalo al final como topping para un sabor extra.

  • Con otras hierbas: Prueba con romero o eneldo en lugar de tomillo.

  • Más vegetal: Añade zanahoria rallada o puerro picado junto con la cebolla.

  • Más ligera: Sustituye la crema espesa por leche evaporada o leche de avena sin azúcar.

Sugerencias

  • Sirve esta sopa con pan tostado, pan de ajo o una ensalada verde.

  • Puedes preparar una tanda doble y congelar porciones individuales para futuras comidas.

  • Si deseas una versión más espesa, reduce ligeramente la cantidad de caldo.

Dietas y opciones saludables

  • Sin gluten: Asegúrate de que el caldo y el queso no contengan aditivos con gluten.

  • Vegetariana: Usa caldo de verduras y asegúrate de que el queso sea apto para vegetarianos.

  • Baja en lactosa: Sustituye la crema por alternativas sin lactosa o leche vegetal y usa queso sin lactosa.

Mejores ingredientes para un sabor premium

  • Papas russet o Yukon Gold: Dan una textura cremosa ideal.

  • Queso cheddar curado o fuerte: Aporta más profundidad de sabor.

  • Caldo casero: Siempre mejora el resultado final.

  • Ajo fresco y mantequilla de buena calidad: Los pequeños detalles hacen la diferencia.

Preguntas frecuentes (FAQ)

¿Puedo usar otro tipo de queso?
Sí, aunque el cheddar fuerte da un sabor característico, también puedes probar con gruyère, mozzarella o una mezcla de quesos.

¿Se puede preparar con anticipación?
Totalmente. Esta sopa se puede guardar en el refrigerador hasta por 4 días y recalentar fácilmente.

¿Se puede congelar?
Sí, aunque la textura puede cambiar un poco al descongelarla por la crema. Revuélvela bien al calentar para recuperar su consistencia.

¿Qué hacer si la sopa queda muy líquida?
Puedes dejarla reducir sin tapa unos minutos más, o añadir una papa extra triturada para espesar.


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