La receta de nuggets de pollo horneados es una opción deliciosa y fácil de preparar que seguramente conquistará a tus comensales. Su combinación de pollo tierno, queso derretido y una capa crujiente de panko es simplemente irresistible. Sin embargo, siempre puedes darle tu toque personal con algunas variaciones y sugerencias que aporten nuevos sabores y texturas. ¡Aquí te dejamos algunas ideas para que experimentes!
Ingredientes
- 500 gramos de pechuga de pollo deshuesada y en trozos de 5 cm
- ½ cucharada de sal
- ⅛ de cucharadita de pimienta negra
- 500 gramos de queso mantecoso o mozzarella cortado en tiras
- 1 taza de panko
- ⅓ taza de queso rallado
- ½ cucharadita de ajo en polvo
- ¼ cucharadita de comino en polvo
- 1 cucharada de aceite de oliva
- ⅓ taza de harina
- 2 huevos grandes ligeramente batidos
Instrucciones
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Precalentar el horno y preparar el panko: Precalienta el horno a 180ºC. En una bandeja para hornear, pon una capa delgada de panko y hornea durante 3 a 4 minutos o hasta que esté ligeramente tostado. Retira del horno, deja enfriar y transfiere a un bol poco profundo. Agrega el queso rallado, el ajo en polvo, el comino molido y el aceite de oliva. Mezcla bien y reserva.
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Preparar la rejilla del horno: Rocía una rejilla del horno con aceite en aerosol para evitar que el pollo se pegue durante la cocción. Reserva la rejilla.
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Preparar el pollo: Sazona los trozos de pollo con sal y pimienta al gusto. Con un cuchillo afilado, corta un bolsillo en cada trozo de pollo, lo más grande posible. Luego, coloca dentro de cada bolsillo un trozo de queso, asegurándote de que quede bien adentro. Reserva.
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Empanizar el pollo: Coloca los huevos batidos y la harina en platos separados. Pasa cada trozo de pollo primero por la harina, luego por el huevo batido y finalmente por la mezcla de panko, asegurándote de cubrir bien el pollo con la costra crujiente. Coloca los trozos de pollo empanizados sobre la rejilla previamente preparada.
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Hornear el pollo: Hornea el pollo durante 10 a 12 minutos, o hasta que esté completamente cocido y la costra esté dorada y crujiente. Al final del tiempo de cocción, verifica que el pollo esté bien cocido en su interior.
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Servir y acompañar: Retira el pollo del horno y sírvelo caliente. Puedes acompañarlo con tu salsa favorita, como una salsa de mostaza y miel, salsa barbacoa, o una ensalada fresca.

Variaciones & Sugerencias
1. Variaciones en el Queso:
- Queso Cheddar: Si prefieres un sabor más fuerte y sabroso, puedes sustituir el queso mantecoso o mozzarella por queso cheddar. Este queso aportará un toque ligeramente picante y cremoso que se funde perfectamente dentro del pollo.
- Queso de Cabra: Para un sabor más sofisticado, el queso de cabra es una excelente opción. Su sabor suave y ligeramente ácido complementará maravillosamente el pollo.
- Queso Azul: Si eres fanático de los quesos fuertes, el queso azul es una excelente elección. Combina de manera sorprendente con el pollo y proporciona un contraste de sabores muy interesante.
2. Variaciones en la Costra:
- Panko Integral: Si buscas una opción más saludable, puedes sustituir el panko tradicional por panko integral. Esto le dará una textura similar, pero con un toque más nutritivo.
- Panko con Especias: Para añadir más sabor a la costra, prueba mezclar el panko con hierbas secas como orégano, albahaca o romero. También puedes agregar una pizca de pimentón o chile en polvo para darle un toque picante.
- Nueces o Semillas: Si te gustan las texturas crujientes, puedes incorporar nueces picadas (como nueces de macadamia o almendras) o semillas (como las de calabaza o girasol) en la mezcla de panko. Esto le dará un sabor y una textura única.
3. Cambios en el Pollo:
- Pechuga de Pavo: Si prefieres una opción más ligera, puedes sustituir la pechuga de pollo por pechuga de pavo. El sabor será ligeramente más suave, pero igual de delicioso.
- Pollo con Piel: Si deseas un toque extra de sabor y una costra aún más crujiente, puedes optar por usar muslos de pollo con piel en lugar de pechuga sin piel. La piel aportará jugosidad y una textura dorada que hará la diferencia.
- Pollo a la Parrilla: Si prefieres un toque ahumado, puedes hacer el pollo a la parrilla en lugar de hornearlo. Solo asegúrate de que el pollo esté bien cocido y con una capa crujiente de panko.
4. Añadir Verduras al Relleno:
- Espárragos o Espinacas: Si deseas incorporar un poco de vegetales al plato, puedes añadir espárragos o espinacas frescas dentro del pollo, junto con el queso. Esto no solo agrega un toque de color y frescura, sino que también eleva el sabor general del plato.
- Tomates Secos: Los tomates secos pueden ser una excelente adición al relleno, aportando un sabor profundo y ligeramente dulce que combina muy bien con el queso.
5. Salsas y Acompañamientos:
- Salsa de Mostaza y Miel: Una salsa de mostaza y miel será el acompañamiento perfecto para este plato. Su mezcla agridulce resalta el sabor del pollo y la suavidad del queso.
- Salsa Barbacoa: Para un toque más audaz, una salsa barbacoa casera o comprada en la tienda puede aportar un contraste delicioso con la costra crujiente del pollo.
- Ensalada Fresca: Acompaña este plato con una ensalada fresca de hojas verdes, tomates cherry y un aderezo ligero. La frescura de la ensalada equilibra perfectamente la riqueza del pollo.
Esta receta es una excelente base para explorar diferentes combinaciones de ingredientes y técnicas de cocción. Con un poco de creatividad, puedes convertir este plato en algo único cada vez que lo prepares, adaptándolo a tus gustos personales o a los de tus invitados. ¡No dudes en experimentar con diferentes variaciones y acompáñalo con una salsa deliciosa para sorprender a todos!
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