Si estás buscando un postre que combine lo dulce, lo crujiente y lo esponjoso en un solo bocado, este dulce ruso es la opción perfecta. Con una base de masa suave, un toque de mermelada de damasco y una capa de merengue con nueces, este postre es ideal para compartir en reuniones familiares, celebraciones o simplemente para disfrutar con una taza de café o té. A continuación, te contamos cómo prepararla paso a paso.

Ingredientes

Para la masa:

• 3 tazas (420 gr) de harina
• 2 cucharaditas de polvos de hornear
• 1 taza (200 gr) de azúcar granulada
• 125 gr de mantequilla
• 3 yemas de huevo
• ½ taza (120 ml) de leche
• 1 cucharadita de extracto de vainilla

Para el relleno:

• 2 tazas de mermelada de damasco
• 5 claras de huevo
• 9 cucharadas de azúcar flor
• 250 gr de nueces molidas
  
  

Instrucciones

 

1. Preparación de la masa:

La base de esta tarta es una masa suave y fácil de preparar. Simplemente coloca todos los ingredientes en una procesadora y mezcla hasta obtener una textura homogénea y manejable. Luego, extiende la masa en un molde previamente enmantequillado de 38 x 26 cm, asegurándote de cubrir bien la superficie y los bordes. Presiona con los dedos para que quede uniforme.

2. Precalentado del horno:

Mientras preparas el relleno, precalienta el horno a 180°C (temperatura media). Este paso es crucial para garantizar que la tarta se hornee de manera uniforme.

3. El relleno: dulce y crujiente

El relleno de esta tarta es lo que la hace especial. Primero, extiende una generosa capa de mermelada de damasco sobre la masa. Luego, prepara un merengue batiendo las claras de huevo hasta que estén firmes y agregando el azúcar flor poco a poco. Finalmente, incorpora las nueces molidas con movimientos envolventes para mantener la textura aireada del merengue.

4. Armado y horneado:

Vierte la mezcla de merengue y nueces sobre la mermelada, asegurándote de cubrir toda la superficie. Usa una espátula para emparejar la capa de merengue. Hornea durante 40 minutos o hasta que la masa esté cocida y el merengue adquiera un tono dorado. Retira del horno y deja enfriar antes de servir.

Consejos & Variaciones

 

• Mermelada alternativa: Si no tienes mermelada de damasco, puedes usar cualquier otra mermelada de frutas, como durazno, frambuesa o fresa.
  
  
• Nueces: Las nueces pueden ser reemplazadas por almendras, avellanas o incluso un mix de frutos secos para darle un toque diferente.
  
  
• Presentación: Para un acabado más elegante, puedes decorar la superficie con nueces enteras o un poco de azúcar glass espolvoreado.
  
  

¿Por qué probar esta receta?